Es extraordinario disponer de un
jardín o una zona ajardinada donde disfrutar del buen tiempo, pasar el tiempo
libre descansando o en compañía de los amigos, pero para poder aprovecharlo,
estamos a obligados a trabajar en el mantenimiento de los muebles exteriores.
Para ello, en La Muralla os
recomendamos algunas acciones que podrán serviros para este tedioso pero
agradecido trabajo.
Muebles de hierro. Desde pérgolas hasta pies de parasol. No son muy
recomendables debido al desgaste que sufren con la climatología. Su escasa resistencia a la
lluvia y a la humedad obliga a un mantenimiento frecuente a
base de productos antioxidantes.
Muebles de aluminio. Estos modelos son más duraderos y resisten
mejor las condiciones exteriores. No aporta la calidez ni la elegancia de la
madera, pero permite crear ambientes modernos y agradables.
Nunca se oxida y puede combinarse
con materiales sintéticos, como el polipropileno o el textileno.
Muebles de PVC. Más utilizados en exteriores ya que además de no
requerir mantenimiento, suele presentar diseños variados y muy modernos
Muebles de teca. Gracias a su resina, resiste tanto la humedad
como la acción de los parásitos; además, permanece prácticamente inmutable a
las inclemencias del tiempo y los cambios de temperatura. Su gran inconveniente
es su precio. Hay tres tipos de teca: asiática, africana o sudamericana.
Llega el invierno. Llegado el mes de Octubre es momento de guardar
el mobiliario exterior, y para ello tendremos que tener en cuenta diversos
aspectos ineludibles Para ello, sigue estos pasos:
1. Límpialos de polvo y de manchas.
2. Revísalos por si necesitan alguna pequeña reparación.
3. Es también un buen momento para lubricar todos aquellos mecanismos que incluyan partes metálicas en los toldos, las mesas extensibles, las tumbonas, las sillas plegables, etc.
4. Procura elegir un lugar para almacenarlos que sea sobre todo seco, ya que la humedad es un enemigo de casi todos ellos (excepto de los de plástico y aluminio).
Otros consejos
Cambia los cojines es una
forma sencilla y económica de renovar cada temporada el aspecto de tu jardín o
terraza. Además de darles un nuevo aire, cambiando los colores y los diseños,
prolongas la vida de tus muebles, pues están así más protegidos.
Uno de los inconvenientes principales de las tumbonas con loneta es que no deben utilizarse mientras están mojadas. Los nuevos tejidos, como el textileno, elaborado a partir de fibras plásticas, acaban con este inconveniente de las telas tradicionales, pues no se deterioran si se mojan habitualmente.