Por eficiencia, comodidad y ahorro, desde La Muralla estamos
convencidos de la necesidad de dedicar parte de nuestro tiempo a decidir qué
sistema de calefacción es el más indicado para tu casa. Debéis pensar que el agua caliente y la
calefacción suponen las dos terceras partes del consumo de energía doméstico,
siendo el resto para la la luz y los electrodomésticos.
Ahorro.
Porque con el consumo de energía los errores se pagan muy caros. Una decisión
equivocada puede suponerte un sobrecoste de más de 650 euros al año. Que es la
diferencia entre instalar una caldera de condensación con sus correspondientes
radiadores de agua o hacerlo con un termo apoyado con radiadores eléctricos en
un piso de 90 m2.
Depende de
tu vivienda. Es interesante decir que para poder instalar una caldera de
condensación (un 18% más eficiente que una caldera tradicional) es imprescindible que tu casa
tenga un suministro de gas canalizado. Una circunstancia de la
que solo disfrutan un cuarto de la población..
- Radiación de calor. El sistema más común es el consistente en hacer pasar agua caliente por unas tuberías bajo el suelo, consiguiendo así un confortable calor por toda la casa
- Radiación de vapor. Sus radiadores están formados por placas de acero dispuestas verticalmente que, al ser calentadas emiten calor con vapor
- Agua caliente (Hidrónico). Se basa en hacer pasar unas tuberías de agua caliente por el aparato y, desde éste, se irradia el calor de las mismas hacia la estancia
- Aire forzado. Consiste en una caldera que calienta el aire y después, mediante un sistema de tubos por toda la casa, éste se hace llegar hasta cada una de las estancias de la misma
- Bomba de Calor Geotérmica (BCG). Básicamente, consiste en un circuito cerrado bajo tierra que permite extraer su calor y llevarlo al interior de una vivienda
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