Instalar baldosas y azulejos (I)

Si queremos instalar manualmente por nuestra cuenta baldosas y azulejos para nuestro cuarto de baño o cocina, lo primero que tendremos que cuidar en el proceso es de la “Ley de la primera baldosa”. ¿Qué significa? Significa que la baldosa más importante en cualquier proyecto de instalación de baldosas es la primera. La colocación de una baldosa con una simple y ligera desviación de una fracción de pulgada puede convertirse en el desencadenante más desastroso ya que el resto de baldosas colocadas irán desviándose cada vez más de manera progresiva hasta que el resultado final sea una terminación fatal

Para evitarlo, mide el área y procura marcar las líneas rectas directamente en la placa de respaldo (placa interior base) para usarlas como guía. Haz una suma a partir de estas señales y determina cuántas baldosas completas necesitarás para llenar cada fila (horizontal y verticalmente) y después ajústelas para que termine con baldosas cortadas del mismo ancho en todos los bordes..

Centrar una baldosa en la línea reduce el número de baldosas, pero aumenta el tamaño de las baldosas cortadas en cualquiera de los extremos, y crea una apariencia más atractiva. Una vez hecho esto, prepare un lote de mortero adhesivo de colocación rápida. Muchos instaladores utilizan cubetas de 5 galones y un agitador impulsado por un taladro como mezcladora. A partir de aquí será mejor seguir las instrucciones del fabricante para obtener las proporciones de agua y mortero correctas, añadiendo el agua necesaria para obtener la textura apropiada.

Unta el mortero adhesivo de colocación rápida sobre las placas de respaldo utilizando una paleta dentada. Cubre el espacio necesario que permita instalarlo en 30 minutos y asegúrate de no cubrir las marcas de sus líneas guía.

Trabajar en un área pequeña a la vez evitará que el mortero se seque antes de instalar la baldosa. En los espacios estrechos en los que la paleta no alcance a distribuir el mortero, podrás untar el mortero en cada baldosa de manera individual. Es decir, usa tu paleta dentada para esparcir el mortero en la parte posterior de la baldosa, creando los mismos surcos del mortero de colocación rápida.

Coloque la primera baldosa sobre el mortero de colocación rápida y presiónelo de manera uniforme sobre el mismo. Gira ligeramente la baldosa mientras intenta regresarla a su estado normal para que el mortero se distribuya de manera uniforme. Deberás levantar la primera baldosa y supervisar la cobertura del mortero en la parte posterior. Si existen partes de la baldosa sin mortero, aplica y cepilla más mortero y reinstala la baldosa. Si más del 80 por ciento de la baldosa está cubierta con mortero, vuelve a colocar la baldosa en su lugar utilizando mortero del mismo grosor que en el resto del proyecto.

Finalmente, coloca los espaciadores entre las baldosas para crear uniones de tamaño consistente. Revisa su progreso regularmente con un nivel y haz los ajustes necesarios mientras el mortero continúa húmedo. Cuando que llegue al borde del área donde aplicó mortero, aplica mortero a una nueva sección y continúa.