Empezando por el principio, los aspectos que deberías tener en cuenta son:
- La decoración
- La durabilidad
- La funcionalidad
- El mantenimiento
Elegir un material u otro y seleccionar un diseño determinado va a condicionar su uso, durabilidad y el mobiliario de alrededor. Es evidente que según el estilo decorativo de la casa, las puertas dan una personalidad especial y dependiendo de la cantidad de veces que la uses y su estacionalidad, hará que decidas contar con un material u otro. Así, algunos tipos interesantes serían los siguientes:
- Puertas laminadas. Las más económicas y, normalmente, de peor calidad. Si están huecas por dentro correrás el riesgo de que se deterioren con mucha facilidad.
- Puertas restauradas. Combinar estilos diferentes y no poseen medidas estandar. Si bien son comunes en casas modernas, es adecuado acudir a un especialista que las haga a medida.
- Puertas de cristal. Utilizadas en las casas para permitir la entrada de mayor luminosidad. Tienen el inconveniente se estar muy dirigidas a gustos o estilos muy particulares. Los hay de varios tipos: transparentes, con dibujos,..y se pueden combinar con otros materiales.
- Puertas de madera. Costosas aunque duraderas, este tipo de puertas suelen utilizarse en estancias más tradicionales o rústicas. Su acabado es de gran belleza pero requiere un enorme cuidado.
- Puertas lacadas. Fáciles de limpiar pues solo se aplica sobre ellas agua y jabón neutro. Suelen ser de color blanco y están de moda.
No hay comentarios:
Publicar un comentario